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4 consejos para limpiar la piel

Limpiar la piel es un paso fundamental en cualquier rutina de cuidado de la piel. No solo ayuda a eliminar la suciedad y las impurezas que se acumulan en la piel a lo largo del día, sino que también prepara la piel para la absorción de otros productos de cuidado facial, como sueros e hidratantes. Una limpieza facial adecuada puede marcar la diferencia entre una piel radiante y saludable, y una piel propensa a problemas como el acné y el envejecimiento prematuro. A continuación, te presentamos algunos consejos esenciales para lograr una limpieza facial efectiva. 

4  CONSEJOS QUE DEBERÍAS SEGUIR PARA LIMPIAR LA PIEL 

1. Evita el agua del grifo de forma diaria, la cal hará que tu piel se seque

El agua del grifo puede contener minerales, como calcio y magnesio, que dejan residuos en la piel, lo que puede provocar obstrucción de los poros y sequedad cutánea. Además, el agua del grifo a menudo contiene cloro y otros productos químicos utilizados para desinfectar el suministro de agua, lo que puede ser irritante para la piel sensible.

En lugar de agua del grifo, se recomienda usar agua filtrada o agua micelar para limpiar la piel. Esto asegura que estés utilizando agua más pura y suave, reduciendo la posibilidad de irritación y daño a la piel. 

2. No uses toalla para secar la piel, se acumulan mucha suciedad

Usar toallas para la limpieza diaria de la piel puede tener efectos negativos. Las toallas, especialmente si no se mantienen limpias y secas adecuadamente, pueden acumular gérmenes y bacterias que, al entrar en contacto con tu piel, pueden provocar infecciones o irritaciones. Además, el roce repetido de la toalla sobre la piel puede causar fricción, lo que podría contribuir a la irritación y al envejecimiento prematuro.

En lugar de usar toallas, se recomienda secar suavemente la piel con una toalla de papel o, preferiblemente, dejarla secar al aire. Esto minimiza la exposición a gérmenes y reduce el riesgo de irritación.

3. No utilices toallitas limpiadoras, irritan la piel y no limpian en profundidad

A pesar de su comodidad , el uso de toallitas desmaquillantes para limpiar la piel es una elección que debemos reconsiderar. Estas toallitas contienen productos químicos agresivos, fragancias y conservantes que pueden ser irritantes para la piel sensible. Además, a menudo no eliminan completamente el maquillaje y las impurezas, dejando residuos que pueden obstruir los poros y causar brotes de acné o irritación a largo plazo.

Otro aspecto importante a tener en cuenta es su impacto ambiental. Las toallitas desmaquillantes son de un solo uso y no biodegradables, lo que significa que contribuyen a la acumulación de residuos plásticos en nuestros vertederos y océanos. Esto afecta negativamente al medio ambiente y la vida marina.

En su lugar, se recomienda una rutina de limpieza facial con un limpiador suave como puede ser la leche limpiadora Dermosensitiva, ya que conseguirás limpiar la piel de una manera mucho más efectiva,  y reducirá la posibilidad de irritación, ya que contiene propiedades calmantes. 

4. Equilibra el pH de tu piel con un tónico facial

Un tónico facial es un paso importante en tu rutina de cuidado de la piel que ofrece múltiples ventajas para mantener la piel equilibrada, hidratada y preparada para recibir otros tratamientos. Incorporar un tónico adecuado puede marcar la diferencia en la salud y la apariencia de tu piel a largo plazo.

En Galium contamos con una amplia gama de lociones destinadas a diferentes tipos de piel (Ver Tónicos)

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